Obama:::: "Hay guerras Justas" El Discurso que justifica las invasiones...

Este jueves 10 de diciembre del 09 Barack Obama gerente de los Estados Unidos de América, recibió el Premio Nobel de la Paz, a tan sólo unos días de dar espaldarazo y aval total a las acciones emprendidas por el gobierno de facto de Honduras en unas elecciones por demás sucias y sin argumento plenamente democrático, a tan sólo unos días de enviar tropas a Afganistan para que continuen con la labor de pisoteo a uno de los países más pobres del mundo y atrasados hasta la humillación en todos los niveles de bienestar humano...

Barack Obama, aún tuvo la permisividad lúdica y digna de satiricón al nombrar a luchadores sociales cómo Mahatma Gandhi y Martin Luther King de forma irónica al citar:"El pacifismo no siempre es suficiente", sostiene No erradicaremos los conflictos violentos en lo que nos queda de vida. Habrá veces en que las naciones, de manera individual o de común acuerdo, encontrarán que el uso de la fuerza no sólo es necesario, sino moralmente justificado, argumentación más sólidad para continuar con su guerra de colonización y por el control de la siembra de droga y al mismo tiempo aplastar la inteligencia y las conciencias del pueblo... (La Droga es el opio del pueblo) Afganistan el territorio en donde más se siembra dicha droga en el mundo ¿Por quiénes? Por el Ejército Estado-unidense... Colombia y México ¿Por qué en estos países el auge de la droga incrementa la irracionalidad de un pueblo sedado por la televisión y la droga? ¿Quién avala a los narcotraficantes y luego hace como que los ataca con una supuesta guerra que defiende al pueblo de sus garras? El mismo Gobierno Yanqui y los lame-botas Colombianos y Mexicanos.

Manifestación de pacifistas en Manhattan, en repudio a la guerra en Afganistán y a la entrega del Nobel de la Paz a Barack Obama.  Foto: Reuters.

Felicidades Barack Obama.

La paz es inestable en sitios donde los ciudadanos tienen negado el derecho de expresarse libremente o de practicar la religión que deseen; elegir a sus propios líderes o reunirse sin miedo. Una paz justa incluye no sólo derechos civiles y políticos, sino también gozar de seguridad económica y oportunidades. La paz verdadera, por tanto, no sólo es ser libre de todo temor, sino tener la libertad de desear.

Un movimiento no violento no hubiera podido detener a los ejércitos de Hitler. Negociaciones no convencerán a los líderes de Al Qaeda de dejar las armas. Decir que la fuerza a veces es necesaria no es llamar al cinismo, sino al reconocimiento de la historia, a las imperfecciones del hombre y a los límites de la razón, afirmó.

Concluyó: Propongámonos lograr el mundo que debe ser, y encontrar esa chispa de lo divino que existe dentro de cada una de nuestras almas.

 Amén

 

Alfonso Bon Caligari